Elon Musk fue entrevistado por Jordan Peterson en la plataforma X, donde discutieron temas como la cultura “woke” y el cristianismo, describiéndose como un “cristiano cultural” e identificándose con el cristianismo por razones culturales y sociales, más que por una fe personal y prácticas religiosas.
En el conversatorio, Musk habló de las enseñanzas de Jesús y la sabiduría que hay en cada una de ellas.
«Aunque no soy una persona particularmente religiosa, creo que las enseñanzas de Jesús son buenas y sabias… Yo diría que probablemente soy un cristiano cultural. Hay una tremenda sabiduría en poner la otra mejilla”, le dijo a Peterson.
Otras personalidades como Richard Dawkins se han descrito a si mismo como “cristianos culturales”, Musk se ha unido a esta lista, que si bien no son practicantes regulares, son defensores de los valores de la fe cristiana y reconocen que ésta construye a la sociedad con buenas costumbres.
“Las creencias cristianas resultan en la mayor felicidad para la humanidad, considerando no sólo el presente, sino todos los seres humanos futuros… De hecho, soy un gran defensor de los principios del cristianismo. Creo que son muy buenos”, expresó el CEO de Tesla.
Musk, el segundo hombre más rico según Forbes 2024 y padre de 12 hijos, afirmó que el declive de la religión está reduciendo las tasas de natalidad, lo que podría transformar profundamente la civilización.
Explicó que una cultura sin religión se vuelve antinatalista y disminuye en número, potencialmente desapareciendo. Asimismo criticó al biólogo Paul Ehrlich, llamándolo “maníaco genocida” por sus advertencias sobre el crecimiento demográfico y resaltó que tener hijos es una promesa para el futuro y el acto más optimista que alguien puede hacer.
Musk también afirmó que prefiere una sociedad basada en creencias cristianas y criticó la cultura “woke”, llamándola un “virus” que afectó a su hijo Xavier, ahora una mujer trans. Musk afirmó que fue engañado para aceptar procedimientos de afirmación de género y calificó la cirugía de reasignación como “mutilación infantil”. Dijo que esta experiencia lo motivó a combatir la cultura “woke”.
Siendo bautizado en la Iglesia Anglicana, no comentó si cree en Dios, pero aclaró que no es un cristiano practicante. Durante su adolescencia, experimentó una crisis de significado que lo llevó a explorar diversas religiones y filosofías, sin encontrar respuestas satisfactorias. Encontró más valor en la curiosidad, inspirada por “La Guía del autoestopista galáctico”, y considera su trabajo en inteligencia artificial como parte de una “religión de la curiosidad”.