Cuando Dios es quien lleva en sus manos todos nuestros planes, 𝗡𝗮𝗱𝗮 𝗽𝘂𝗲𝗱𝗲 𝘀𝗮𝗹𝗶𝗿 𝗺𝗮𝗹.
Por eso, si algo no está saliendo como tú deseas, medita si no tomaste en cuenta a Dios en ese plan, o si él mismo intervino para que el resultado fuera distinto al que planeaste, todo con el fin de protegerte. Recuerda, Él siempre sabe lo que es mejor para sus hijos. Procura su dirección en todo lo que desees lograr, y el resultado será mejor de lo que esperas. Confía en Dios, bendiciones

por Rafael Osorio.

Buenos días.