Dios misericordioso, nuestro ayudador, te saludamos esta mañana con alegría y agradecimiento . Sentimos tu bienvenida y esperamos tu enseñanza. A medida que el sol se eleva más alto, que nuestras vidas se eleven hacia ti en la alabanza activa de los deberes de este día. Muéstranos hoy lo que quieres que hagamos. Dios todopoderoso, te pedimos que nos llenes de sabiduría e inteligencia en nuestra vida, cada día lléname de Tu amor. Dios te bendiga

por Rafael Osorio.