El comediante Rob Schneider es la más reciente figura pública en criticar la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de París 2024 por supuestamente “celebrar a Satanás” con una actuación que muchos interpretaron como una burla a la famosa pintura de Leonardo da Vinci, “La Última Cena”.
El ex miembro de “Saturday Night Live” expresó su descontento en X este domingo, dos días después de que la actuación captara la atención mundial.
«Lamento decirles a todos los mejores atletas del mundo que les deseo todo lo mejor, pero no puedo ver unos Juegos Olímpicos que faltan el respeto al cristianismo y celebran abiertamente a Satanás», escribió en una publicación.
«Espero sinceramente que estos Juegos Olímpicos tengan la misma cantidad de espectadores que CSPAN», añadió.
El espectáculo incluyó a una intérprete con un tocado plateado, acompañada por artistas drag y bailarinas. Durante la actuación, una cantante ligera de ropa y pintada de azul apareció sobre la mesa.
El domingo, Schneider compartió una imagen del artista pintado de azul en X, criticando la actuación y cuestionando si estaba viendo los Juegos Olímpicos o una reunión de la junta escolar.
«¿Chicos con sus genitales colgando frente a los niños? ¡¿Drags Queens?! No estaba seguro si estaba viendo los Juegos Olímpicos o si estaba viendo una reunión de la junta escolar…», expresó.
La ceremonia de apertura provocó una reacción violenta en Internet, con figuras como Elon Musk y Donald Trump condenando el espectáculo.
Líderes cristianos también se opusieron, con Daniel Darling calificando la actuación como una burla grotesca de la Cena del Señor.
Sin embargo, otros, incluida la primera dama Jill Biden, apoyaron la ceremonia, considerándola espectacular.
Muchos creen que la representación no pretendía burlarse de “La Última Cena”, sino que era una referencia a la fiesta de Dioniso. Los organizadores insistieron en que no querían ofender.
