Dieciocho fiscales generales estatales en Estados Unidos respaldaron la demanda del exprofesor de música John Kluge, quien perdió su empleo por no utilizar pronombres de género al referirse a los alumnos que no reconocen su sexo biológico.
La coalición, liderada por el Fiscal General de Indiana, Todd Rokita, presentó un escrito (amicus curiae) ante el Tribunal de Apelaciones de los Estados Unidos para el 7º Circuito, solicitando que se reconozca la violación de la libertad religiosa del docente.
En 2017, el distrito escolar implementó una política que requiere que los maestros utilicen pronombres y nombres que «reflejen» la identidad de género autoafirmada de los estudiantes, incluso si no coinciden con su sexo biológico.
Kluge, profesor de música en la Brownsburg Community School Corporation en Indiana, se encontró en una disputa sobre los pronombres y se le dio la opción de renunciar o ser despedido. Siendo cristiano, solicitó una adaptación religiosa para evitar el uso de pronombres, prefiriendo llamar a los estudiantes por sus apellidos.
Aunque inicialmente se le concedieron las adaptaciones, el distrito escolar revocó el acuerdo después de recibir quejas de alumnos y colegas, y finalmente «obligó al Sr. Kluge a dimitir o ser despedido».
En respuesta a esta situación, el escrito “Amicus curiae” o “amigo del tribunal”, presentado ante el Tribunal de Apelaciones de los Estados Unidos para el 7º Circuito, destaca cómo el distrito escolar desaprovechó la oportunidad de mostrar respeto hacia las personas con diferentes creencias y prácticas religiosas al forzar la dimisión de Kluge.
Los fiscales generales expresaron su preocupación por la discriminación hacia profesores con convicciones religiosas y enfatizaron que las escuelas deberían enseñar el respeto a todas las religiones en lugar de imponer uniformidad de pensamiento.
Todd Rokita, líder de la coalición, afirmó que el compromiso de Kluge de evitar por completo el uso de pronombres le permitiría tratar a todos con igualdad y respeto mientras se mantiene fiel a sus creencias religiosas.
El distrito escolar ha argumentado que el arreglo solicitado por Kluge representa una carga excesiva y podría afectar la aplicación de sus políticas.
Además, han planteado que negarse a utilizar los pronombres y el nombre preferido de un alumno podría infringir la prohibición del Título IX sobre discriminación por razón de sexo, una cuestión actualmente en tribunales.
En 2021, un profesor en Virginia fue despedido por criticar una propuesta de política que obligaba a los docentes a usar los pronombres y nombres preferidos de los alumnos, aunque finalmente se llegó a un acuerdo para su reinstalación.
