Deuteronomio 30:19 A los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu descendencia; 20 amando a Jehová tu Dios, atendiendo a su voz, y siguiéndole a él; porque él es vida para ti, y prolongación de tus días; a fin de que habites sobre la tierra que juró Jehová a tus padres, Abraham, Isaac y Jacob, que les había de dar.
El Señor nos dice hoy también a nosotros que elijamos la vida. No podemos estar pensando en satisfacer nuestro cuerpo momentáneo dejando la responsabilidad de ser hijos del Señor. Es un privilegio que si lo descuidamos perdemos esos beneficios que hemos de recibir en el futuro por ser hijos obedientes del Señor. Vemos el ejemplo de Esau y Jacob.
Genesis 25:27 Y crecieron los niños, y Esaú fue diestro en la caza, hombre del campo; pero Jacob era varón quieto, que habitaba en tiendas. 28 Y amó Isaac a Esaú, porque comía de su caza; mas Rebeca amaba a Jacob. 29 Y guisó Jacob un potaje; y volviendo Esaú del campo, cansado, 30 dijo a Jacob: Te ruego que me des a comer de ese guiso rojo, pues estoy muy cansado. Por tanto fue llamado su nombre Edom.[a] 31 Y Jacob respondió: Véndeme en este día tu primogenitura. 32 Entonces dijo Esaú: He aquí yo me voy a morir; ¿para qué, pues, me servirá la primogenitura? 33 Y dijo Jacob: Júramelo en este día. Y él le juró, y vendió a Jacob su primogenitura. 34 Entonces Jacob dio a Esaú pan y del guisado de las lentejas; y él comió y bebió, y se levantó y se fue. Así menospreció Esaú la primogenitura.
Esau prefirió lo momentáneo y menospreció el ser el primogénito con sus beneficios. Prefirió satisfacer el deseo del momento y vendió su primogéniitura. Aunque era plan del Señor y lo que el Señor dice se cumple; hoy día se hubiera dicho, “el Dios de Abraham, Isaac , y de Esau… pero no. Hoy se dice, “El Dios de Abraham, Isaac, y Jacob.” Tomemos el ejemplo de no perder ser hijos de Dios. Nos ha ofrecido la bendición de ser como el primogénito, Jesús, junto a esos beneficios que Él ha prometido compartir con su pueblo. No lo perdamos por satisfacer deseos momentáneos.
Quizás Esau no creyó o no entendió lo serio de lo que dijo, pero lo que decimos tiene poder de afectarnos.
Proverbios 18:21 La muerte y la vida están en poder de la lengua, Y el que la ama comerá de sus frutos.
Saquemos tiempo para el Señor. Llenarnos de la palabra del Señor. Busquemos el reino del Señor.
Mateo 6:33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. 34 Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.
El mundo y sus deseos son pasajeros. El ladrón hurta y la polilla corrompe. A veces descuidamos el tiempo del Señor por estar queriendo hacernos de dinero para proveer a nuestros hijos cosas que anhelamos. Quizas estamos esforzados por tener una casa mejor, tener dinero, carros pero no sabemos si moriremos, oh perderemos lo que con tanto esfuerzo hemos conseguimos; o si ni siquiera nuestros hijos le darán el valor a nuestro esfuerzo.
Mateo 6:21 Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.
Vamos a enfocarnos en pasar tiempo en la presencia del Señor llenándonos de poder y su hermana presencia. Hagamos estudios de la palabra del Señor a través del discípulado, estudio de la palabra del Señor. Para que en el momento podamos someternos al Señor, resistir la tentación y cuidar nuestra salvación.
Predica: Pastora Dayana Núñez
9/19/24